Como todos sabemos los canalones son sistemas de recogida de la lluvia de las cubiertas que se encargan de evacuar el agua. De este modo evitamos que caiga directamente de los alerones del tejado. Causando incomodidades e incluso provocando humedades y filtraciones en la vivienda o edificio. Sin embargo, aunque todos conocemos su función. Muy pocas personas pueden distinguir entre las diferentes partes que forman un sistema de desagüe de este tipo. Más allá de los canalones y bajantes.
Lo normal es que no te hayas preguntado sobre las distintas partes de un sistema de evacuación pluvial. Salvo que te hayas enfrentado a una instalación de canalones o a una reparación de alguno de esos componentes. Aparentemente lo único que vemos desde el exterior es un conducto que recorre el perímetro de la construcción. Sin embargo, un sistema de canalones está compuesto por muchas más partes. Y cada una cumple una función específica. Por lo que a continuación, vamos a contarte como expertos del sector las distintas partes del canalón.
Canaletas, distintos tipos de canalones
Antes de entrar de lleno en diferenciar todas las partes que componen un sistema de recogida de agua de lluvia. Vamos a distinguir dos tipos de modelos de canalones muy diferentes entre ellos. Ya que cada modelo tiene también unas partes específicas. Aunque antes de nada tenemos que señalar que los canalones o canaletas son los conductos que recogen directamente el agua de lluvia del tejado. Se sitúan pegados al borde de la cubierta para que el agua caiga sin problema a su interior. Pueden ser de distintos materiales como aluminio, cobre, zinc o acero galvanizado. O tener distintas formas, aunque lo más importante es si se trata de canalones sin juntas o por secciones.
El modelo más tradicional, por decirlo de alguna manera, son los canalones seccionales. Este tipo de sistema de compone de distintas secciones individuales de canalón que se unen para formar el sistema completo. Así para poder ensamblar y sujetar cada sección es necesario contar con unos ganchos o palomillas que se colocan en la fachada del edificio o bien en las tejas. Aunque hay que señalar que también se pueden colocar unos enganches ocultos para colgar los canalones que no se ven desde el exterior. Dada la cantidad de secciones, piezas y uniones que requieren estss canaletas, la realidad es que suelen ser menos duraderos. Presentando filtraciones y necesitando reparar o sustituir piezas con más asiduidad.
Por otro lado, encontramos los canalones continuos. Con una durabilidad más elevada y una mayor precisión. Este tipo de canaletas se hacen a medida para ajustarse totalmente al edificio en el que se vayan a colocar y asegurar que funcionen correctamente. Ya que al ser piezas sólidas sin uniones se reduce mucho la posibilidad de filtraciones o de rotura de secciones. Si bien es cierto que este tipo de canaletas suele tener un coste inicial mayor, lo cierto es que a la larga ahorran tiempo y dinero. Al no necesitar habitualmente el trabajo de expertos en la reparación de canalones.
Las bajantes en un sistema de canalones
Tal y como acabamos de ver, las canaletas son los conductos encargados de recoger el agua de lluvia del tejado o cubierta. Pero para que pueda evacuarse el agua correctamente es necesario contar con un elemento que la conduzca hacia la parte baja de la construcción. Ese elemento son las bajantes.
Se trata por tanto de tubos verticales cerrados que se colocan cada ciertos metros en el sistema de canalones, para permitir que el agua drene de los canalones hacia el exterior. La colocación del número de bajantes pertinentes en cada sistema de canalones deberá hacer un instalador especializado. Ya que dependerá de muchos factores. Como la estimación de precipitaciones o la capacidad de los canalones.
Igual que los canalones, las bajante pueden estar hechas de distintos materiales. Además de ser rectangulares o redondas. Además, pueden combinarse con las canaletas o bien hacerse combinaciones para crear distintos efectos estéticos.
El codo en un sistema de canalones
Una vez el agua ha descendido por las bajantes desde los canalones, es necesaria hacer que se vaya lejos de los cimientos del edificio o vivienda. Ya que de lo contrario podrán aparecer humedades en los sótanos o cimientos de la construcción. Para ello se coloca el codo al final de las bajantes.
Es un tubo doblado que permite canalizar el agua para que salga en un punto alejado de la fachada. Aunque hay que señalar que estos tubos doblados también se pueden instalar para unir las bajantes a los canalones. Cuando éstos se encuentran en los alerones alejados de la fachada. Ya que de este modo la bajante se instala pegada a la pared y el agua se conduce por este tubo a través de la doblez. También pueden usarse en ocasiones para conectar unas bajantes con otras cuando haya obstáculos en la fachada.
Por lo que podemos resumir que un codo es una pieza doblada del mismo material y forma que los canalones o las bajantes. Que les conecta o bien alarga las bajantes para la evacuación del agua en un punto alejado de la construcción.
Las tapas de los canalones
Las tapas son unas piezas que se colocan en los extremos de los canalones para evitar que el agua pueda verterse por los laterales de los conductos. Ya que las canaletas se encuentran abiertas en sus extremos para facilitar la unión de distintas secciones si fuera necesario. De este modo además ejercen como topes laterales en caso de mucha afluencia de agua para evitar desbordamientos.
Estas piezas suelen tener la forma de los canalones para ajustarse perfectamente a sus extremos. Aunque es cierto que también se pueden usar como elementos decorativos siempre que cumplan su función como tapas en los laterales de los canalones.
Los ingletes en un sistema de canalones
Esta pieza es muy importante siempre que se instale un sistema de evacuación de agua de lluvia en una vivienda con esquina. Ya que los ingletes son las partes de los canalones que se colocan en las esquinas de cualquier tejado. Uniendo por tanto otras dos secciones.
De nuevo, los ingletes se adaptan al estilo del resto del sistema. Pudiendo encontrarse en todas las opciones de materiales y forma de los canalones. Sin embargo, hay que señalar que estas piezas deben revisarse con especial cuidado al hacer el mantenimiento de los canalones. Ya que es relativamente fácil que se acumule suciedad ahí.
Las sujeciones de un sistema de canalones
Las palomillas son unos soportes que se instalan en la fachada del edificio y sobre las que se colocan los canalones. Se trata por tanto de unas piezas de metal que se atornillan directamente a la construcción. Están formadas por una parte con la forma del perfil del canalón que se vaya a colocar. Para mejorar así su colocación y sujeción. Una vez están las palomillas instaladas y puesto el canalón en su lugar, se colocan unos tornillos de seguridad que aseguran las canaletas.
Sin embargo, hay otra alternativa a los ganchos o palomillas. Se trata de unas fijaciones ocultas o perchas, que se colocan en el interior de las canaletas en la zona superior. De manera que no pueden ser vistas desde el exterior. Creando una instalación mucho más limpia.
Por otro lado, las piezas que se encargan de sujetar las bajantes a la fachada reciben otro nombre. Estas piezas son las abrazaderas. Y se trata de elementos de metal con forma cilíndrica que abrazan totalmente el conducto. Cuentan en cada extremo con un tornillo para poder asegurarse a la fachada.